En el Foro Cervantes, encontré una mención a este artículo publicado en PRIMERAS JORNADAS, Nuestra lengua, un patrimonio. Y me pareció sumamente importante compartirlos con ustedes, ya sean profesores o usuarios del idioma.
La situación, la realidad reflejada en este artículo me hace reflexionar, en lo que vivimos en nuestros países. Después que lean el artículo, o por lo menos parte de él, pues sólo coloque una parte de él aquí, verán que los que les digo es verdad.
Existe un lenguaje que aprendemos y usamos con amigos y familiares, y otro que aprendemos en la escuela. Recuerdo muy bien esto, pues cuando salíamos para algunas reuniones donde no podíamos hablar jergas pues no se veía bien, teníamos que tener mucho cuidado con el vocabulario y formas de expresarnos, como si fuera otro idioma.
Cuando pasé por la facultad, entendí que mi idioma no era suficiente para conseguir el conocimiento que necesitaba para aprobar las disciplinas, y fue ahí que el inglés entro en mi vida. En la escuela pasó, pero fue algo tan rápido que ni vale la pena considerar.
Es una realidad que tiene que ser cambiado, si queremos cambiar el resto. Y en estos tiempos que se habla mucho de cambios, lo principal, creo yo, es que comencemos por casa y en especial, por nuestro idioma.
¡Espero sus comentarios!
Jô
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La Argentina necesita una política lingüística
RICARDO NAIDICH
Desde 1989 la Argentina ha entrado de lleno en la globalización, un concepto vago que intenta definir una supuesta integración de los países, más allá de sus fronteras. Para los argentinos la globalización es sinónimo de privatizaciones de las empresas estatales, Mercosur y estabilidad monetaria. Pero también en este período la economía argentina se ha concentrado, de modo brutal, en pocas manos.
El capital extranjero tiene abierta las puertas a la economía, casi sin restricciones. Y las desigualdades sociales así como la falta de presupuesto para la educación y la salud son cada vez mayores. En la Argentina está en discusión, sin duda, cuál será el modelo de país que estamos construyendo para el siglo XXI. Este debate socioeconómico no puede excluir a nuestro idioma, el castellano, ya que las decisiones que se adopten afectarán, de un modo u otro, a nuestra lengua.
¿De qué modo la política socioeconómica del Gobierno afecta a nuestra
lengua?
Del mismo modo en que los ingresos de moneda extranjera dependen de las exportaciones y el saldo comercial significa mayores ingresos a repartir de acuerdo con el presupuesto nacional, toda decisión socioeconómica tiene un efecto indirecto - y a veces directo- sobre nuestro lenguaje. Las comunicaciones, la música, los canales de cable, el comercio, las ciencias y la medicina, por citar algunos ejemplos, exigen conocimientos avanzados de inglés. Los libros de texto más importantes, las páginas de Internet y la información llegan a nosotros en inglés. Si uno quiere estar actualizado en cualquier área del conocimiento, sin esperar la tardía publicación de la traducción de un libro, debe poder, al menos, leer inglés. No por nada el gobierno nacional repite, una y otra vez, que las dos condiciones indispensables para progresar es saber computación e inglés.
¿DEBEMOS, ENTONCES, ENSEÑAR INGLÉS A NUESTRO HIJOS?
Sin lugar a dudas, quienes vivimos muy lejos de los centros de poder mundial necesitamos aprender lenguas extranjeras para poder comunicarnos con el resto del mundo. Pero, además de repetir tantas veces la importancia de una lengua de comunicación, nadie dice qué lenguas nos conviene aprender y por qué.
¿Acaso no es importante aprender portugués, cuando nuestras exportaciones dependen cada vez más de los productos que vendemos al Brasil? ¿Qué sucede con nuestras exportaciones a los EE.UU.? Algo muy simple: cada día son menores, mientras nuestras compras al gran país del norte se incrementan año tras año. Frente a esta realidad, los políticos argentinos deben discutir seriamente qué política lingüística debemos asumir en estas tierras.
Los argentinos vivimos en un vasto territorio donde el castellano es la lengua dominante. Desde la época de la colonización española el castellano se ha impuesto como la lengua nacional y desde entonces hemos realizado importantes aportes al desarrollo del idioma que hablan 350 millones de personas en todo el mundo. Hablamos una misma lengua con un acento propio desde hace algunos siglos. Eso se traduce en tener una identidad cultural y lingüística importante. Podemos resumir nuestra situación lingüística del siguiente modo, siguiendo el modelo de los lingüístas suecos Ulf Teleman y Margareta Westman: Las esferas donde utilizamos nuestra lengua son:
- La esfera privada: el hogar, la salud, las relaciones sociales, el tiempo libre y el trabajo.
- La sociedad: la escuela, la técnica, la investigación, la vida cultural y económica.
- La esfera global: la medicina, la técnica, la ciencia, la política internacional, la industria cultural, la actividad comercial
En las tres esferas el idioma es el medio de comunicación fundamental.
Pero el idioma que se utiliza en una esfera es diferente al que se habla en la otra. En la escuela hablamos un castellano diferente al del hogar, que a su vez es diferente al de un noticiero en la televisión. Cuando nos vinculamos con el mundo, nos damos cuenta de que necesitamos dominar otra lengua diferente a la que utilizamos en la esfera privada y la sociedad. En las áreas de comunicación de la esfera global y a determinados niveles del conocimiento, tales como las empresas multinacionales, el comercio, la ciencia, la música y la televisión por cable, el inglés predomina por sobre el castellano. Lo mismo sucede en Internet.
Es indudable que para comprender la esfera global los argentinos deben
comprender y hablar inglés. ¿Pero cuántos argentinos tienen posibilidad de adquirir una destreza aceptable en el dominio de la lengua extranjera? La mayoría de los argentinos pueden vivir tranquilos, lingüísticamente hablando, en la esfera privada y hasta cierto punto en la sociedad. Pero son pocos, una ínfima minoría, la que tiene el privilegio de comprender lo que sucede en la esfera global. Esto significa que algunas personas se especializan continuamente en áreas del conocimiento con dominio del inglés, tales como las ciencias naturales, la medicina u otras.
¿Qué consecuencias sociales implica dejar el monopolio de los conocimientos a esos pocos que dominan el inglés? ¿Qué problemas enfrentaremos los argentinos del siglo XXI cuando las encuestas de evaluación de la calidad de la educación del propio Ministerio de Educación entre los alumnos primarios y secundarios demuestran que la gran mayoría no puede comprender textos ni resolver problemas matemáticos elementales? ¿Cuáles deben ser las prioridades de nuestra política educativa? ¿Es posible aprender inglés sin dominar nuestra propia lengua?
Lo que sucede en nuestro país, debido a la falta de dominio del castellano, es que los jóvenes argentinos (y muchos que ya no lo son) ya “no encuentran” las palabras adecuadas para expresarse en su propia lengua. Es frecuente escuchar explicaciones sobre lo sencillo que es utilizar una palabra inglés frente a otra castellana. ¿Por qué no decir software, rating, marketing o e-mail?
Y ya que ponderamos la importancia del inglés en nuestras vidas, nuestros hijos ¿aprenden inglés en las escuelas estatales? La respuestas es obvia: los jóvenes no aprenden el inglés y no dominan el castellano.
La educación que reciben estos chicos jamás les permitirá ingresar en los conocimientos que brinda la esfera global. A largo plazo nuestros jóvenes comprenderán que existen dos lenguas:
una, el castellano, para la vida cotidiana; y otra, el inglés, como la lengua por excelencia de muchas ramas del conocimiento. Los diarios y los libros que se lean en castellano serán aquellos que reflejarán temas relativamente comunes. Los textos que apunten al conocimiento serán impresos en inglés. Y esta situación se verá agravada por las deficiencias para comprender textos en castellano que hoy tienen los alumnos primarios y secundarios. Este problema no es una cuestión cultural o de identidad exclusivamente: hace al interés nacional.
Vale la pena leer esta cita: “Si yo pudiera hacer algo de manera inmediata (en América del Sur), sería revolucionar la calidad de la educación paratodos los chicos de la región”. La frase la dijo el presidente Bill Clinton en su visita a Buenos Aires.
......Texto completo
PRIMERAS JORNADAS: Nuestra Lengua un Patrimonio
...Continuación
MIS PROPUESTAS
Al igual que otras lenguas, el castellano debe ser un idioma que contenga TODOS los vocablos que la ciencia y la técnica generan. No debe existir un idioma para la esfera privada y la sociedad, mientras otra lengua se utiliza en la esfera global.
Al igual que los países de la Unión Europea, debemos seguir luchando por lograr que nuestro idioma sea reconocido como lengua oficial en todos los ámbitos internacionales.
Las autoridades argentinas deben reafirmar nuestra lengua como la única oficial en todos los ámbitos, incluso el académico. El gobierno debe extremar las medidas para que las reparticiones públicas reconozcan la vigencia de la ley 20305 de modo tal que todos los documentos redactados en lengua extranjera sean traducidos por un traductor público.
El gobierno argentino debe reconocer el derecho de todos los ciudadanos a aprender y dominar al menos dos idiomas extranjeros. Esa decisión democrática permitirá que todos los argentinos tengan posibilidad de participar en los debates que el mundo discute en torno a la globalización.
El gobierno argentino debe garantizar la enseñanza efectiva de idiomas extranjeros en las escuelas.
Las universidades deben garantizar el derecho de todos los alumnos a estudiar todas las áreas del conocimiento en castellano. Los medios de comunicación deben garantizar que la información llegue al público en un correcto castellano.
Los empresarios deben apelar a los traductores públicos al traducir las indicaciones y descripciones de sus productos.
El gobierno argentino, por último, debe convocar a los profesionales de Primeras Jornadas “idiomas para discutir y analizar la política lingüística que adopte finalmente la Argentina.
2 comentários:
Hola profesor ahora que aprehendi a compartir de tu blog, después de tanto tiempo, Quiero felicitarte por ese articulo sobre el idioma español.
Profesor, tu no crees que adelante de esas crisis mundial en que estamos viviendo en eses días atuales, Os Estados Unidos dejará de ser a principal potência mundial, y que otro pais pueda asumir el controle, y que hay una posibilidad de idioma español o mandarin venir a ser el idioma universal tale como el inglês? que te parece?
Hola Alzito,
Es una situación difícil para EEUU pero no vamos a pensar que será fácil eliminarlo de la lista de los países más poderosos. La China es uno de los favoritos para sustituirlo. Pero el ingés está bien divulgado, en diferentes áreas.
Ya el español es un idioma que poco a poco está ocupando el lugar que merece, debido al trabajo de muchas personas, de personajes ilustres, que divulgan el español con el ejemplo.
Creo que hay espacio para varios idiomas, no necesita uno sustituir el otro. Convivencia, es la palabra que resumiría mi opinión.
Saludos
Jo
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